Resumen de mi año 2019

El Señor dice:

«Yo te instruiré,

    yo te mostraré el camino que debes seguir;

    yo te daré consejos y velaré por ti»

Salmo 32:8

El año 2019 fue un año de decisiones y de cerrar capítulos. Como ustedes saben, hace 3 años tomé la decisión de servir al Señor a tiempo completo como misionera y desde ahí las decisiones no han parado en mi vida, cosas que ni siquiera me he imaginado pero que el Espíritu de Dios me ha dirigido a hacerlo y se que ha sido Dios porque definitivamente en mi propia voluntad no lo hubiese hecho. El año 2019 fue uno de muchos ayunos y de búsqueda para hacer la voluntad de Dios y no la mía.

Después de regresar del campo misionero pensé que volvería allá en 4 o 5 meses pero Dios tenía otros planes para mí. Cerrar el capítulo de mi regreso prontamente al campo fue difícil pero Dios me puso paz. Definitivamente, las personas que conocí en Madagascar hicieron un antes y un después en mí, están en mi corazón y siempre lo estarán, sin excepción de una. Las he extrañado tanto y esto me ha hecho orar mucho por el sur de la isla y por cada persona que escuchó el dulce Evangelio.

Te amo Madagascar

YO TE MOSTRARE EL CAMINO QUE DEBES SEGUIR…

En el mes de Marzo del año pasado supe que me quedaría más tiempo en Ecuador, por tanto, me involucré mucho en la agencia de misiones en la que colaboro con sus programas. Empezamos con un retiro espiritual en donde renovamos votos con la obra de Dios, así mismo colaboré con los diferentes seminarios y campamentos para movilizar a niños, adolescentes y adultos. Incursioné en una nueva área como la del Cuidado Integral del Misionero: estuve acompañando muy de cerca a una de nuestras misioneras que salió en el mes de Febrero hacia otra parte de África, acompañarla a ella en su adaptación al campo fue recordar como me sentí en esos primeros años en una tierra nueva y ser de mucha utilidad para ella fue muy significativo para mi. 

Despidiendo a esta linda amiga para el África

Comprometidos en Ir a las naciones

Yo soy Impacto Mundial

En Abril, Dios me dio “luz verde” para comenzar a buscar y entrar en conversaciones con otras organizaciones a fin de comenzar mi proceso de retorno al campo como si fuera la primera vez, empezando de cero con todos los documentos y procesos que se debe seguir. Lo bueno es que cuando uno aprende una lección lo hace bien, al menos yo he sentido así siempre. Esta vez ya no tuve miedo a empezar el proceso y saber que tenía que desprenderme nuevamente para ir a lo desconocido.

Desde ese tiempo hasta Septiembre 2019 me encontré haciendo entrevistas con el nuevo grupo al que Dios mediante me uniré cuando regrese a Madagascar. Este grupo está ubicado al norte de la isla y lleva varios años alcanzando a los malgaches allá.

TEMAS DE CORAZON…

Dios, en su bondad, me permitió conocer a un hombre que comparte la misma pasión y amor por los no alcanzados en el mundo. Al conocerlo, sentí mucha paz y era muy agradable conversar con él. Así que decidimos conocernos de una manera más intencional para saber nuestros sueños y anhelos en Dios. 

Después de casi un año y medio de relación de amistad y noviazgo finalmente en Diciembre ambos dimos el “Sí” delante de Dios comprometiéndonos servirle en el campo misionero donde El nos enviara, por ahora será en Madagascar. Ambos tenemos ese deseo de estar en la gran isla roja aprendiendo el idioma y sirviéndole con el Evangelio. Por lo pronto, mi esposo deberá comenzar su proceso y entrevistas con el campo misionero para que ambos seamos aceptados y poder estar allá.

Tiempo en el servicio dominical

<3 Lov u

SE VIENE MUCHO MAS…

En este año 2020 se vienen muchas cosas que las vamos a ir compartiendo poco a poco con todos ustedes que nos leen y que oran por nosotros. Este año será de mucha preparación y aprendizaje no solamente en la vida cristiana/misiones sino también en nuestra vida personal como recién casados (aprender a amar a pesar de nuestras diferencias).

Si estás leyendo este blog: ¿Qué consejitos darías para nosotros como recién casados? También puedes dejar tus peticiones de oración para estar orando por ellas.

ORA POR:

•        Agradecimiento a Dios por sus bondades y su fidelidad para conmigo.
•        Agradecimiento por toda la provisión y cuidado que El tuvo para mi en todo el 2019.
•        Por mi familia y amigos.
•        Por las conversaciones con el campo y las entrevistas futuras en caso que hubieren.
•        Por guía de Su Santo Espíritu en el nuevo año.

  

iCuidado! No conviertas tus piedras en pan

Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.

Mateo 4:3 RVR1960 

Por: Diana Lin

La mayoría de las veces que he leído acerca de Las tentaciones de Jesús he relacionado que sólo El pudo vencerlas por ser Dios y osaríamos en decir que esto es una ventaja muy grande que nos deja a toda la humanidad fuera de poder hacer algo así. Pero, iqué equivocados que estamos al pensar de esta forma!

En el relato de las tentaciones, Jesús nos descubre su corazón, poniendo delante de nuestros ojos sus luchas, luchas que fueron similares a las nuestras. El no solamente fue tentado como Dios sino como hombre mismo. Esta historia nos está diciendo que Jesús puede ayudarnos en nuestras tentaciones porque El mismo fue tentado. (Hebreos 4:15)

Recordemos que Jesús salía de un tiempo de ayuno de 40 días. Humanamente estaba a punto de morir. Muchos estudiosos y eruditos de la Palabra consideran que la lucha que Jesús tuvo fue más allá que una mera oposición externa de encontrarse en una montaña con Satanás en donde se podían ver “todos los reinos de la tierra”, por el contrario, se dice que su lucha fue interior, en su propio corazón, mente y alma.

Personalmente esto abre mis ojos a pensar en “las tentaciones de Jesús” no como una serie de tv asiática en donde los enemigos vienen con todas estas fuerzas de poderes y luces del mal lanzando llamas y que Jesús es “el pepudo” que sin mucho esfuerzo los derriba y posteriormente le atribuimos su victoria a su naturaleza divina. Esta nueva comprensión me hace reflexionar en Jesús como Dios pero sin usar su poder divino para librarse de las dificultades y hacer su vida más fácil que la nuestra, me hace pensar en una batalla limpia que El la luchó y la venció, y me asombra aún más saber que esta lucha no fue “física dándole un patazo al diablo” sino una lucha en su mente donde la batalla se complica mucho más pues es un campo en donde todas las cosas son posibles y no hay límites.

Lo que más sobresale en esta historia es que las tentaciones fueron dirigidas a alguien que tenía poderes y que sabía que los tenía y cómo podía usarlos para librarse. Para mí, la mayor tentación que veo aquí es ser tentado a hacer mi propia voluntad, tener el pleno conocimiento que tengo las armas para defenderme y que puedo usarlas de la manera que quiera para no sufrir las tentaciones. Este era el plan de Satanás, que Jesús usara sus poderes para convertir las piedras en pan (recordemos que las piedras son nuestras tentaciones en nuestra mente, alma y cuerpo y que el pan es la forma de alivianar las tentaciones para no sufrirlas), y de esa forma cambiaría el plan de Dios que era que el primer milagro tuviera cita en la fiesta de las bodas convirtiendo el agua en vino mostrándonos que su poder divino era para saciar las necesidades de otros y no la suya misma a su conveniencia.

Finalmente quiero terminar haciendo una reflexión sobre esto último: una y otra vez somos atacados por nuestros dones, por aquello que sabemos hacer bien porque ha sido un regalo de Dios y siempre tendremos la tentación de usarlo para salirnos con la nuestra, para nuestro propio bien y no para el de otros, como decía William Barclay “para convertirse en amo y no en servidor de la humanidad”. Es como convertir las piedras en pan, es como buscar pan sin Dios.